jueves, 12 de septiembre de 2013

A defender la economía de la familia

Nacional Estamos sin empleos y de nada sirve luchar contra la violencia A defender la economía de la familia Por: Carlos Damián 20 de Agosto, 2013 Hay corrupción en el reparto de gasolinerías México. - Nuestra nación vive la más grande decadencia política, económica y social y de seguridad en la historia del país. Eso se debe a que sus gobiernos neoliberales llevan más de 30 años saqueando los bienes de la nación y despojando de sus derechos a los mexicanos. Bajo el pretexto de la modernización se privatizaron los bancos, aerolíneas, ingenios azucareros, puertos, aeropuertos, minas, carreteras y otras empresas públicas. Ya en manos privadas quebraron y el gobierno las rescató con recursos del erario público. Al privatizar más de mil empresas de la nación que fueron públicas, el Estado mexicano como buen bombero fue a apagar el fuego, y al rescatar las empresas ahora propiedad de la iniciativa privada gastó más de 90 mil millones de dólares. Todavía estamos pagando el rescate bancario (donde ahora todos los bancos son propiedad de trasnacionales), y ya nos quieren imponer desde el gobierno federal la entrega de la industria petrolera y de sus enormes ganancias a compañías extranjeras. Pemex es la empresa más rentable de México y el gobierno federal dice que ‘no va a venderla ni privatizarla’. Pero no es necesario vender las instalaciones de una empresa pública para privatizar su actividad. Por ejemplo nunca se ha vendido un sólo fierro de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) pero la mitad de la generación eléctrica del país ya la producen compañías privadas extranjeras; por mantener sus negocios se cobran elevadas tarifas de luz domesticas y al pequeño empresario. Eso es precisamente lo que quieren hacer con el petróleo de los mexicanos. Cada año el país obtiene del petróleo un billón 250 mil millones de pesos, o sea unos 100 mil millones de dólares aproximadamente. Eso representa 40 por ciento del presupuesto nacional. En otras palabras, cuando se construye una escuela el 40 por ciento del dinero proviene del petróleo; cuando se edifica un hospital, 40 por ciento de los recursos para su construcción vienen del petróleo; cuando se le paga a los maestros o en su caso a los doctores del ISSSTE, o del IMSS, 40 por ciento de sus salarios de esos profesionistas provienen del petróleo; de la misma forma, el 40 por ciento del monto de las pensiones de los empleados públicos. Con el petróleo también se paga 40 por ciento de los libros de texto gratuito, de la vivienda de interés social y de la distribución del agua. El petróleo financia la tranquilidad de las familias mexicanas y es la base de nuestra independencia económica. Si se entrega la riqueza petrolera a empresas privadas, así sea parcialmente, las finanzas públicas dejarán de recibir más de un tercio de sus ingresos. Al vender las instalaciones, la producción, la refinación tanto de tierra como del mar, el gas shale, la investigación y tecnología. ¿A dónde se irá la renta petrolera? La clase media y los miserables, ya que el gobierno aumentaría los impuestos, mientras seguirán perdonando las evasiones de los grandes empresarios el pago de sus contribuciones fiscales. Por eso quieren aumentar el IVA de 16 al 19 por ciento y extenderlo a medicinas, alimentos, libros, transporte, colegiaturas y vivienda; esto sería un duro golpe a la economía de la mayoría de las familias mexicanas, ya que en estos rubros gastan 90 por ciento de sus ingresos. Es inevitable que la privatización del petróleo conduzca al incremento de impuestos. Las compañías extranjeras sólo ambicionan quedarse con las enormes ganancias que genera el petróleo y no invertirán en el desarrollo de México. Cuando fueron dueñas del petróleo mexicano no pagaban impuestos y daban salarios miserables sin prestaciones a sus trabajadores mexicanos. Obviamente los ciudadanos tanto ingleses como estadounidenses ganaban sueldos generosos y justos. La corrupción en el reparto de gasolina Ciertamente se encuentran indicios de corrupción en la asignación para operar gasolinerías de Pemex en los sexenios de Vicente Fox y Felipe Calderón. Fueron repartidas 7 mil 559 entre políticos, parientes, empresarios, amigos e inclusive empresas trasnacionales. La cadena 7-Eleven (o Oxxo), por mencionar alguna; opera alrededor de 400 estaciones de servicio que venden gasolina y diesel. En cuanto al empresario Paul Karam Kassab que está ligado a la familia Hank, es quien estuvo envuelto en una investigación de la SAT por evasión fiscal a finales de la década pasada, tiene expendios en distintas partes de la República. Antes del año 2000 operaban 3 mil 221 gasolinerías (gasolina y diesel), en los dos sexenios panistas la cifra subió a 10 mil 780, con el resultado de que el mercado se encuentra sobresaturado. Miguel Alonso Raya (MAR), dice, “La proliferación de gasolinerías se debió al pago de facturas y cobro de favores de los gobiernos en turno”. “Además, esas franquicias son la preparación de la futura competencia contra Pemex. Al rato veremos a Shell, (o Exxon) con permisos para vender gasolina. En este tema debe meterse a fondo el IFAI para efecto de transparentar la compra de las gasolinerías. ¿Qué clase de personas las adquirieron? Indica MAR. De acuerdo con del legislador integrante de la Comisión de Energía de la Cámara de Diputados, este tema tendrá que ser discutido en la Comisión de Energía como parte de la reforma energética. Destacó que se propondrá que las franquicias se entreguen por convocatorias y previo análisis de necesidades reales, además de hacer públicas las adquisiciones. Por su parte, el presidente Pablo González (PG), de la Asociación Mexicana de Empresarios Gasolineros, A. C. (Amegas), mencionó algunos comentarios referentes a este tema. El presidente PG dijo, que el crecimiento de las franquicias está por encima de la planta vehicular. Además, es sabido que muchos de los franquiciatarios son prestanombres incluso de empresas trasnacionales. “Silenciosamente se han metido cadenas comerciales en el negocio, como 7-Eleven (y tiendas OXXO), que tienen proyectado pasar de 400 estaciones (de gasolina) a mil”, agregó. Los empresarios agrupados en esta asociación solicitarán al Congreso y a la Secretaría de Economía que la regulación para la apertura de nuevos expendios sea de carácter federal, porque en los municipios tiene lugar numerosas irregularidades. El territorio petrolero de Chicontepec En una ronda de subastas de contratos integrales de servicios para la exploración y explotación de crudo en Chicontepec, tres bloques de territorio fueron adjudicados a las compañías Halliburton, Operadora de Campos DWF y Petrolite de México; el proceso de concesión de dos bloques fue declarado desierto y el restante se difirió. En conjunto, los bloques subastados suman reservas totales posibles por 3 mil 195 millones de barriles de petróleo crudo, que significan aproximadamente 15 por ciento de las reservas totales de Chicontepec. Los contratos integrales de servicios son aquellos que permiten al capital privado explorar y producir en campos petroleros del país, este tipo de contratos de riesgo fueron introducidos en la legislación reglamentaria de la industria petrolera en el marco de la reforma energética en 2008, y constituye un instrumento jurídico de dudoso apego al mandato estipulado en la Constitución. En este contexto de riesgos, es preocupante que una buena porción de territorio y de los recursos petrolíferos del país hayan sido entregada al control de particulares mediante formas de contratación que constituyen, en el mejor de los casos una inconsistencia jurídica que pone en riesgo la propiedad pública y la soberanía del Estado sobre los recursos propiedad de la nación, y que debe en consecuencia ser corregida. Es más preocupante aún que en esta operación se encuentre la empresa Halliburton, representante paradigmática de un modelo de depredación corporativa inescrupuloso y violador de la legalidad, como quedó demostrado con las fraudulentas asignaciones de contratos en Irak y Afganistán, que representaron el desvío, a favor de esa compañía, de parte de los recursos destinados por la Casa Blanca durante la invasión estadounidense a esos países. Si algún sentido tiene la reforma energética es acotar el creciente poder fáctico que han adquirido las empresas energéticas, y anexas en territorio nacional. Ello necesariamente sucede prohibiendo a los particulares conceder el control de bloques de territorio nacional, como aquellas parcelas de terreno nacional de Chicontepec. (La Jornada, política, p.p. 4- 13, 12 de Julio, 2011).

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