México invierte

Internacional México compra 51% de acciones del astillero Hijos de J. Barreras en Europa México invierte en el extranjero Por: Carlos Damián 30 de Diciembre, 2014 Se apoya al aumento de empleos en Galicia en el sector de embarcaciones México. - Se invierte en el extranjero a contrapelo de las declaraciones del ejecutivo Federal en las que México tiene un alto de desempleo y con miseria galopante en toda la República, sin embargo el propio gobierno no se preocupa por sus ciudadanos pero parece que el gobierno trata de lucir en España como un faro en la obscuridad europea y una señal obscura para el pueblo de México, pero que se espera para quien compra la presidencia? En México tiene más de 30 años de no invertir en una refinería de petróleo y ahora nos tratan como subhumanos al explicarnos la negación de aumentar el empleo en México a través de estas plantas tan necesarias para Pemex y para el pueblo de México. Nuestro progreso actual es venderle limones en pesos a Estados Unidos y comprarle jugo de limones a precio dólar. En las notas en el periódico se anuncia que Petróleos Mexicanos (Pemex) invertirá mas de 300 millones de euros (más de 5 mil 200 millones de pesos), para “reactivar a la industria naval de España”, que se encuentra al borde de la quiebra y desesperada, al tener más de dos años sin firmar ningún contrato. La paraestatal mexicana dio a conocer asimismo que compró 51 por ciento de acciones de astilleros Hijos de J. Barreras, que es una empresa al borde de la quiebra, que actualmente tiene a toda su plantilla laboral en un expediente de regulación de empleo (ERE) y entregó su último encargo en junio de 2011: un ferry de pasajeros. Adquisición de embarcaciones El coordinador de asesores de Pemex, Carlos Roa (CR), viajó a Vigo, España para rubricar el acuerdo, que se inició hace más de año y medio, en el que han intervenido tanto el presidente de España, Mariano Rajoy, como el mandatario mexicano, Enrique Peña Nieto (EPN), así como el presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijoo; el director general de la filial internacional de Pemex, PMI, José Manuel Carrera Panizzo, y el director de la paraestatal, Emilio Lozoya. El origen de este convenio de “intenciones” para rescatar de la penuria y la bancarrota a la industria naviera española proviene del anterior presidente Felipe Calderón y en aquel entonces director de Pemex, Juan José Suárez Coppel, quienes recibieron la petición expresa de las autoridades españolas y galegas de invertir en el sector para sacarlo del riesgo de quiebra, el cual todavía prevalece, a pesar de esta primera inversión anunciada por Pemex de 300 millones. Pemex no aclaró en su pequeño comunicado en la operación financiera sobre el monto pagado, y el acuerdo con la que se adjudicó 51 por ciento de esta inversión, una compañía emblemática del corporativo Vigo. Se solicito la intervención del gobierno de México a través de Pemex para activar la grave crisis social y económica de los astilleros gallegos que en una primera instancia se comunicaron con el ex presidente Calderón pero fue el presidente EPN quien respondió en más de tres ocasiones a los compromisos hechos por su antecesor con su par en Galicia. En esta segunda administración del ex presidente Calderón, perdón de EPN se pudo comprometer a Pemex a contratar con astilleros gallegos la fabricación de hoteles flotantes denominados flóteles y 14 remolcadores petroleros, de los cuales siete serán de exclusiva manufactura española y el resto serán vía conversión con astilleros mexicanos y españoles. También se prevé la compra de 150 embarcaciones de diverso calado en los próximos años, beneficiando a la economía de Galicia con estos contratos a la naviera española. Pemex invierte 300 millones de euros en España La paraestatal proyecta invertir 70 millones de dólares en la edificación de un centro de almacenamiento y comercialización en el puerto de La Coruña, el cual ya está en marcha al ser aprobado. En este compromiso Pemex asumió el control del astillero y CR explica así: “culmina un largo proceso que comenzó en la primavera de 2012 con la firma de un protocolo de intenciones, el cual pretende contribuir a la reactivación de la industria naval en España, y a su vez, aprovechar la oportunidad para transferir tecnología y conocimiento al sector naval mexicano”. Además informó, que la construcción de los barcos, que tendrán un costo de 300 millones de euros, se hará mediante la firma de un contrato con la empresa Procesa originaria de Chiapas, para la fabricación de un atunero que trabajará en las costas del Pacífico mexicano, así como la construcción de tres buques-tanques que brindarán apoyo a Pemex sector Refinación. La fabricación de embarcaciones se iniciará en el primer bimestre de 2014. Asimismo se firmó un protocolo de intenciones con la empresa mexicana Diavaz para la construcción de un buque de apoyo a plataformas petroleras. El funcionario explicó que están evaluando la posibilidad de trasladar a vivir y trabajar a nuestro país a técnicos y profesionales españoles. Pemex proyecta construir un astillero en México, de acuerdo a las explicaciones de Carlos Roa, pero no han aclarado sobre la plantilla laboral elegida para su destino, ya que los empleados todavía están sometidos a un ERE, tal vez sólo sea un sueño de que el acuerdo secreto tiene una cláusula que prevé una sanción severa si se devela el contenido del pacto, en el que se incluye el protocolo a seguir con la plantilla de trabajadores. Por otra parte en México la Secretaría de Economía (SE) en México explora si puede reactivar la marina mercante nacional, ya que el gobierno federal esta abandonando por más de 25 años, de hecho a la industria naval nacional y a los astilleros militares mexicanos. La SE en base a las declaraciones emitidas opina que el gobierno federal debió recurrir a la contratación de “astilleros extranjeros” para ampliar su flota naval, lo cual incluye la construcción de dos plataformas apara albergar trabajadores, conocidos como floteles y siete remolcadores. Con esta óptica de perdedores han recurrido a astilleros españoles descuidando a la Secretaría de Marina y olvidando a navieros nacionales, (La Jornada, Armando Tejeda). El escándalo de los astilleros La dependencia federal destacó que la Secretaría de Marina únicamente se enfocará en la construcción de embarcaciones menores y Pemex continuará los contratos con empresas de otros países para ampliar su flota. Un año y mes después de que la Cámara de diputados aprobó un punto de acuerdo para solicitar a la SE que “implemente políticas que fortalezcan e impulsen la industria naval mexicana a fin de incrementar sus capacidades, infraestructura y tecnología y se reactive su participación en el desarrollo del país”, la dependencia respondió que explora” si se puede reactivar la marina mercante nacional. La solicitud se hizo en e contexto de un escándalo surgido por el convenio firmado en Galicia, España, para el rescate de los astilleros gallegos que se encuentran en bancarrota. Originalmente, la solicitud presentada por el PAN planteaba exhortar al director de Pemex, Emilio Lozoya Austin, a que “se cancele el acuerdo firmado con Galicia, para la construcción de 14 remolcadores: siete en astilleros gallegos y siete en colaboración con astilleros mexicanos”, convenio cuya existencia fue negado por Pemex. (La Jornada, economía, p. 24, 17 de Diciembre, 2013).