viernes, 7 de noviembre de 2014

La corrupción americana

Nacional
Se requiere una revolución pacífica de honestidad
La corrupción en América
Por: Carlos Damián                                        23 de Octubre, 2014
AMLO afirma que el gobierno “nos regresa al pasado para quitarnos el futuro”
México. -   El régimen mexicano “está podrido” y para rescatar al país de las consecuencias de 30 años de neoliberalismo, un régimen muy parecido al régimen del ex presidente Porfirio Díaz –llamado porfiriato-, “la revolución pacífica que se requiere es la de la honestidad”, resumió Andrés M. López Obrador (AMLO) en la Universidad Columbia, en Nueva York. En un foro AMLO subrayó que, “nada ha dañado más  a México que la corrupción política; a eso se debe la monstruosa desigualdad social y económica, la pobreza y la violencia que nos agobia”. Esa corrupción, señaló, es integral a la aplicación del neoliberalismo que está despojándolas riquezas del pueblo y de la nación para beneficio sólo de unos cuantos. “La deshonestidad en el actual período neoliberal no tiene precedente”, argumentó, agregando que “se ha implantado como modus vivendi el robo de los bienes del pueblo y de las riquezas de la nación”. 

Nos regresa al pasado de la Nueva España
Acusó: “la corrupción se ha convertido en la principal función del Estado (…) un pequeño grupo ha conquistado todos los poderes y mantiene secuestradas las instituciones públicas” para sus propios intereses, lo cual ha llevado al “saqueo más grande en la historia del país”. “En México no hay democracia… es una dictadura simulada”, una que gira en torno a “la misma mentira que durante el porfiriato”, donde se subastaron los recursos naturales del país, incluyendo el petróleo, las tierras de cultivo, y se vendieron los ferrocarriles y más a las empresas extranjeras, afirmó. “”El llamado neoliberalismo es neoporfirismo (actualizado)… Nos regresan al pasado para quitarnos el futuro”. Presentado por John Coatsworth, vicerrector de la Universidad de Columbia e historiador especializado en México, y por el director del Centro de Estudios mexicanos. Claudio Lomnitz (colaborador de La Jornada), AMLO rompió en este foro, la imagen tan cuidadosa y efectivamente proyectada en este país por la cúpula política y empresarial mexicana y estadounidense, ofreciendo una crítica del llamado “nuevo paradigma”, al indicar que sólo es más de lo mismo.

Afirmó que EPN es la continuación del proyecto neoliberal implementado desde hace tres décadas en el país. “La mafia del poder” lo impuso, afirmó y acusó que EPN es sólo otros “subordinado de la oligarquía” que está cumpliendo con las prioridades de ese pequeño grupo al impulsar las llamadas “reformas estructurales” con un “alto costo a la soberanía”. La reforma del sector energético, sostuvo, es el “robo más grandes de la historia” y lo calificó de “traición de la patria”, al buscar “repartir a las grandes petroleras extranjeras la riqueza del pueblo y la nación”. Afirmó que por ello el Movimiento  Regeneración Nacional (Morena), está promoviendo un referendo en las próximas elecciones para obligar a que “el pueblo sea consultado” sobre esta “reforma”. Como ejemplo del despojo acelerado, señaló que en cinco años las mineras extranjeras se han llevado más oro y plata de México que los españoles durante 200 años de la Colonia.

Despojo minero
Afirmó que el régimen es sostenido por dos cosas: los grandes medios y “la compra del voto”, y que sin eso se desplomarían, agregó que el actual presidente es un fenómeno “escenográfico”. Indicó, con una sonrisa, que mientras aquí en Nueva York “premian a Peña Nieto con algo llamado estadista mundial o algo así, en México está reprobado”, en la opinión pública mexicana. De hecho esta percepción se está ampliando a casi todos los gobernadores e indica un cambio político potencial en México. Expresó la consternación ante los sucesos en Iguala, indicó que esto no es un incidente aislado y que “ya llevamos mucho tiempo de luto” en México. Argumentó que la violencia es resultado del sistema actual y que, por ahora, la estrategia del gobierno ha empeorado la situación, pues busca “enfrentar la violencia con la violencia… Emplear fuego contra fuego”. Subrayó que primero se tiene que entender que “la paz es fruto de la justicia”.  Por eso, “mientras no haya un cambio de fondo, México se continuará hundiendo”.

Concluyó que se “tiene que derrocar al régimen  del PRI-PAN (…) pero sin violencia”. Ese cambio necesario, explicó, proviene de “un retorno a los principios de Francisco I. Madero: la honestidad y la justicia”. Al extenderse en su plática, AMLO subrayó que el mejor antídoto a la corrupción es mantener ”los principios e ideales” y recordó que en esfuerzo de Morena “no es fácil crear un partido en un ambiente antidemocrático”. Declaró que México “tiene una gran reserva de valores”, que se encuentra en sus pueblos, sobre todo en los indígenas. “La corrupción es algo que viene de arriba… Eso se limpia como se limpian las escaleras, de arriba hacia abajo”. Recordó que esta lucha pacífica para una transformación a afondo es constante y que ante los fraudes, el control mediático y la compra del voto –“algo que duele, parte del alma”-, la “mejor manera de enfrentarlo es luchando todos los días”. Advirtió contra la “depresión” de algunos, incluso muchos  intelectuales, que se cansan  o creen que ya no hay más que se pueda hacer, y que ante preguntas de “si podemos llegar, o que cuánto tiempo mas, la respuesta es: sigue caminando, sigue caminando”, sino te mojas.

Andrés M. López Obrador exigió las renuncias del presidente EPN “por ser responsable de la situación de inseguridad  que padece México”, del procurador Jesús Murillo Karam, “porque representa al PRI y a la mafia del poder, más no al pueblo”, y del gobernador de Guerrero, Ángel Aguirre, “debido que perdió autoridad para administrar a esa entidad”.  En conferencia de prensa, AMLO dio a conocer seis posicionamientos en torno al asesinato y desaparición de normalistas de Ayotzinapa. Primero, consideró lamentable que la muerte de los estudiantes sea “un problema originado por el predominio de una mafia en el poder que encabeza Peña”. El segundo planteamiento, dijo, “es que renuncie Aguirre porque, tenga responsabilidad o no, perdió autoridad y no se puede gobernar a un estado bajo las circunstancias en que está Guerrero”. Tercero que Murillo Karam renuncie, “porque no es representante de la sociedad ni de la nación”. Cuarto, lamentó el crimen (de lesa humanidad) en contra de los normalistas, al cual calificó de “acto de barbarie que lastima, que duele”. Quinto, pidió castigo “sin miramientos” (agotar hasta la última sangre para encontrarlos aunque sea muertos), a los culpables. Y sexto, deseó que aparezcan con vida los 43 desaparecidos.

AMLO rechazó conocer al presidente municipal de Iguala, José Luis Abarca, y no descartó  que lo relacionen con él quienes “creen que todos son iguales y pretenden afectar a Morena”. Añadió que EPN “no tiene capacidad y entre más tiempo dure en la presidencia peor nos va a ir a los mexicanos”.  Mi percepción en estos días de gira, yo creo que es lamentable que no se atienda en Michoacán, como en el resto del país, que no se esté impulsando el desarrollo. Es grave que se pretenda resolver el problema de la inseguridad sólo con medidas coercitivas, con el uso de la fuerza. Por otra parte Cuauhtémoc Cárdenas advirtió que “está en la conciencia” del gobernador de Guerrero, renunciar o no al cargo. “El conoce la situación del estado y es su decisión determinar si permanece o se va”, insistió.  En cuanto a la situación que prevalece en el PRD Nacional, dijo desconocer si la salida del gobernador de Guerrero “ayuda o no” a serenar el estado de cosas; señaló no saber si una acción de esta naturaleza le quitaría presión al sol azteca: “lo importante que se encuentre a los jóvenes estudiantes”, cerró la entrevista. (La Jornada, política, p.p. 3-10, 20 de Octubre, 2014).

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