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Nacional  
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Buscan apoyar a afectados por contaminación de
  ríos 
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El gobierno federal  con criterios sesgados 
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Por: Carlos Damián                                         16 de Septiembre,
  2014 
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Las autoridades recurren a garlitos para evadir
  sus obligaciones legales con las comunidades 
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México. -  
  La asociación de Autoridades Locales de México (Aalmac) demandó apoyo
  económico, de manera urgente, para brindar los servicios públicos que “están
  siendo gravemente afectados por la falta de agua”, así como impulsar la
  producción agrícola, ganadera y comercial de los habitantes de químicos de la
  mina Cananea a los ríos Bacanuchi y Sonora. En un pronunciamiento, la
  agrupación de municipios de izquierda sostuvo que los más de 24 mil
  habitantes de los ayuntamientos de Arizpe, Aconchi, Banámichi, Baviácora,
  Huépac, San Felipe y Ures requieren solidaridad inmediata para hacer frente
  al desastre ambiental provocado por la mina, propiedad de Grupo México, de
  Germán Larrea. “La propietaria de Buena vista del Cobre no ha actuado con la
  responsabilidad debida, ni se está haciendo cargo seriamente de esta
  problemática generada por su irresponsabilidad, amarrete y cobardía. Los
  apoyos económicos y en especie a los municipios, así como las medidas
  paliativas de saneamiento distan mucho de atender a fondo a la población”,
  señaló Aalmac. Recordó que las concesiones otorgadas por Grupo México dejan
  en riesgo a 617 municipios mineros en el país, debido a que éste “no se
  caracteriza por tomar medidas de seguridad como prioridad”.  
En cuanto al ejido reforma agraria integral, es
  otro asunto con múltiples problemas jurídicos de fondo.  La CCC lleva 12 asuntos que se ubican en
  Tlaxcala, Tamaulipas y estado de México, la mayoría de ellos corresponde a
  casos que involucran la construcción de autopistas, instalaciones de la
  Marina y del aeropuerto en Toluca. Pero también está el caso del ejido
  Reforma agraria Integral –considerado el más grande del país, pues tiene 632
  mil hectáreas propiedad de 300 ejidatarios-, 30 por ciento de su superficie
  está concesionado a una minera, pero la empresa lleva a cabo exploraciones
  fuera de esa superficie y deja material en las parcelas no involucradas en el
  convenio. Esto es un despojo ya sea en términos jurídicos y en habla
  coloquial y el estado sólo se lava las manos. En este contexto de despojos
  los ejemplos sobran y para que no quede duda, las inefables “autoridades”
  medioambientales dan muestras fehacientes de cómo     “regularán”, “manejarán”, “resolverán” y
  “sancionarán” las múltiples situaciones de alto riesgo ecológico producto,
  favorecidas por las privatizaciones petroleras y eléctricas. El advenimiento
  de las hordas trasnacionales y empresas nacionales que las “acompañarán” para
  darle el barniz de expropiaciones y petroleras nacionales que a la larga sólo
  quedarán los peces grandes y nos referimos a las trasnacionales que ayer y
  ahora actualmente manejarán a su antojo los precios y tarifas de los
  derivados petroleros.  
Más claro que el agua de Bacanuchi y
  Sonora 
Las advertencias del gobernador californiano
  Edmund G. Brown han quedado en algún bote de basura y no porque hayan llegado
  a tiempo sino que las autoridades gubernamentales,  legislativo y la suprema corte de justicia
  siempre han favorecido a los trasnacionales extranjeros y nacionales en
  detrimento de los ciudadanos mexicanos, con la garantía de que van a crear
  empleos y riqueza trasnacional, y hasta la fecha todo sigue igual que hace
  treinta años. En algún tramo de circunstancia y de tiempo el gran capital “se
  comió vivo” al gobierno mexicano y al capitalista mexicano, bueno en estos
  tiempos, no sólo cocina y sirve la mesa, sino que arma la fiesta, pone
  música, canta y baila zapateado de Guadalajara, todo a gusto del patrón
  extranjero. El mensaje para aquellos descreídos es el mensaje gubernamental
  que envió el ejecutivo de la Semarnat, Juan José Guerra Abud: a pesar del
  desastre ambiental, “La empresa –de Germán Larrea, favorito del sistema- no
  puede ser clausurada ni siquiera temporalmente… (porque) no puede frenarse la
  actividad económica. Tuvieron un descuido que causó el daño ambiental, (pero)
  el país tiene que crecer económicamente.  
De esta forma se ha definido la norma oficial de
  ecocidio al sistema, que va de la mano de otros corporativos nacionales y
  extranjeros, y de esta forma no se cerraran a estos corporativos que
  intoxiquen y asesinen a los humanos, flora y fauna, sólo por la simple razón
  de que “el país tiene que crecer económicamente”. Mientras que la Secretaría
  de Economía que es la que otorga las concesiones mineras, con su silencio otorga,
  y eso que a Ildefonso Guajardo le fascinan los micrófonos. Con estos
  antecedentes y “criterio” oficial nadie tendría derecho a combatir los
  delitos de: narcotráfico robo, fraude, secuestro, bancos, y todos los delitos
  de cuello blanco, ya que estos criminales y asesinos solo tienen como
  objetivo ganar dinero, ergo no hay que “satanizarlos”, pues ellos contribuyen
  con su esfuerzo “al crecimiento de la economía del país”. Se pueden imponer
  una multa, pero “ni temporalmente” quitarles la concesión, porque esos
  delitos están activos por concesión gubernamental. Si estos argumentos los
  tomamos como ciertos sin conceder, ahí tendremos a las pandillas de las
  drogas robando, matando y llevándose el dinero del pueblo por una concesión
  del mal gobierno, ya que “el país debe crecer económicamente”.   
Al definir los alcances de las acciones
  gubernamentales y ratificada la impunidad del minero Grupo México, con Germán
  Larrea Velasco, entonces el ejecutivo de la Semarnat se animó a calificar de
  mentiroso al corporativo y a decir que el derrame de más de 40 mil litros
  cúbicos de desechos tóxicos por la empresa Buenavista del Cobre es “el peor
  desastre ambiental de la industria minera del país”. Pero como el derrame
  tóxico “contribuye al crecimiento de la economía del país”, entonces la
  “autoridad” ambiental “castigará” a la empresa con una multa ridícula y
  absurda de un monto aproximado equivalente al 0.1 por ciento de las
  utilidades netas reportadas por Grupo México (GM) en el primer semestre de
  2014, pero que esto no lo impresione, es obvio que GM impugnará y recurrirá a
  los tribunales con sus amigos del Poder Judicial, es de recordar que es el
  segundo más rico de México, el señor feudal de la minería. Con este criterio
  y parámetro cínico y sesgado se entiende porque la Procuraduría Federal de
  Protección al Ambiente, institución gubernamental que debe vigilar y proteger
  al capital natural del país, (Profepa) certificó  a GM como “industria limpia” y el
  corporativo con este papel en el bolsillo, presume que “operamos con los más
  altos estándares de cumplimiento ambiental a nivel nacional e internacional”.
   
Son este tipo de empresas que ponen en un grave
  brete a las autoridades permisivas, que tienen que actuar como payasos y malos
  cómicos al tapar con un dedo, “el mayor desastre ecológico en la industria
  minera que opera en el país”, al multar con 40 mil millones de pesos, y
  Germán Larrea tiene 5 mil veces más en el bolsillo para hacer frente a las
  contingencias de emergencia. No contento el corporativo les avienta otra papa
  caliente: el descarrilamiento de un enorme tren cargado con ácido en Sonora,
  de su propiedad. Aunque desde Nuevo León, más de lo mismo: “los habitantes de
  los ejidos colindantes al río San Juan en el municipio de Cadereyta
  informaron a la autoridad desde hace seis meses; sólo les hicieron caso
  cuando el río en su totalidad estuvo contaminado y no se podía más. Los peces
  y aves comenzaron a morir, por la acción de Pemex retardada. El peligro es
  para Monterrey, N. L., ya que al llegar el agua contaminada a la presa El
  Cuchillo, que provee de agua a la capital del estado privará a sus habitantes
  de esta agua llena de tóxicos. ¿Cómo hacer que la ciudadanía se vuelva
  participativa?, sólo será posible cuando los ciudadanos se mueran de sed, de
  cáncer y enfermedades raras. (La Jornada, política, p.p. 12-36, 9 de
  Septiembre, 2014). 
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lunes, 20 de octubre de 2014
El gobierno federal con criterios sesgados
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