Nacional
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Los gobiernos federales
del PAN estuvieron sometidos a presiones de empresarios
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Las condiciones no son
suficientes
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Por: Carlos Damián Noviembre 6,
2015
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Estos mandatarios (PAN) fueron
los más corruptos y mediocres que ha tenido México: NGU
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México. - El
dirigente del Sindicato Nacional de Trabajadores Mineros, Metalúrgicos y
similares de la República Mexicana (SNTMMSRM), Napoleón Gómez Urrutia (NGU),
desde el 28 de agosto de 2014, argumenta que no están dadas las condiciones
legales para volver a México, luego de sufrir un exilio obligado, voluntario
de 10 años en Canadá. Aunque el tribunal colegiado lo exoneró hace 14 meses,
de la responsabilidad de desvío de recursos del fideicomiso del sindicato que
aún dirige desde el exilio. Los
mineros son la tercera generadora de divisas en el país, el líder solicita al
gobierno de la República firmar un acuerdo de colaboración y garantías para
continuar en México como dirigente nacional del sindicato minero. Gómez
Urrutia (NGU) tras la muerte de su padre Napoleón Gómez Sada, desde 2001
rescató el mando del gremio y rápidamente fue involucrado en una pugna con
los tres principales concesionarios de la minería en la nación. El terrible
choque de intereses de las tres grandes; Grupo Peñoles, México y Acerero del
Norte, con el líder minero que derivó en el exilio luego el líder nacional acusó directamente a
Germán Larrea del grupo México de “homicidio industrial” por la explosión del
socavón de Pasta de Conchos, en febrero de 2006, con un saldo de 65 mineros
muertos que hasta el día de hoy no han sido rescatados sus cadáveres.
Impunidad total
De acuerdo al líder nacional minero los tres
empresarios han buscado la aniquilación del sindicato, buscando su interés
personal. “No se lo vamos a entregar a ningún hijo de la chingada”,
advierte. Al reunirse con los
integrantes cercanos a la dirigencia del sindicato han planeado las
estrategias para afrontar estas agresiones de los empresarios mineros y
cobijados por el gobierno federal para desaparecerlo. Pero el líder nacional
conmina al gobierno federal que representa EPN a “terminar con la persecución
y pasar a una nueva etapa en la relación política con el sindicato”. Propone
para afrontar esta situación un evento sindical con la participación de los
líderes gremiales del mundo, y con la presencia del presidente mexicano.
Menciona que acudan los líderes de los países del Norte que representan a 800
mil afiliados a los Steel Workers, y al sector minero de estos tres países de
América del Norte. El presidente del sindicato Steel Workers, Leo Gerard es
fundamental para facilitar los contactos con el sector laboral y político de
Canadá. El líder mexicano originario de Nuevo León tiene a salvo sus derechos
políticos en México y en Canadá desde junio de 2014 es ciudadano canadiense,
es considerado un héroe por los mineros en Canadá, y es sumamente apreciado
en este país. Fue asignada una oficina dentro de la organización minera, es
un caso atípico en el mundo minero ya que vive en el extranjero dirigiendo al
sindicato minero mexicano pero a pesar de la distancia está informado de las
revisiones contractuales y salariales del país. Fue vuelto a elegir en la
dirigencia para el período 2014- 2020, junto con su gabinete minero del
primer círculo.
Recordando su jornada en el exilio, desde 2005 y
teniendo en cuenta los considerables episodios que ha enfrentado, y subraya con
dedo de fuego a los funcionarios federales del PAN: Vicente
Fox y Felipe Calderón. Como uno de los principales adversarios por su
completo sometimiento a los dictados de los empresarios mineros, ello
permitió la impunidad en la mina Pasta de Conchos, de la muerte de Juventino
Flores Salas, en asalto de grupos de choque financiados por Alberto
Bailleres, y al igual que Larrea han alentado la división y oposición en la
organización minera. Con melancolía indica sus comienzos como líder minero
que le etiquetaban como “junior” y “heredero”, pero lo acusaban sin fundamento
pasando por alto sus grados universitarios debido a que es un economista
trilingüe, terminando con honores sus estudios de postgrado en Oxford. Relata
que en la disputa por el poder en la mesa de discusión se encontraban “dos
traidores”: el ‘Sope’ Morales y los
grupos acereros del Norte, el grupo México, y también grupo Peñoles. Fue
varias veces visitado en Vancouver por el grupo Acereros del Norte, que preside Alonso Ancira Elizondo: “Llegaste
al poder 25 años antes, México no está preparado para un líder como tú”,
decía el vocero del empresariado nacional. Al responder el líder minero, “los
únicos que deciden el futuro del sindicato son los trabajadores, no ustedes”
los empresarios.
Empresarios ignorantes e
insensibles
“Más de nueve años he tenido que arrastrar esta
persecución política, usando una serie de argumentos políticos, y jurídicos
contra los empresarios” y respondiendo a políticos inventados, ocurriendo
esta situación horas después del derrame en Sonora, siendo la responsabilidad
del Grupo México que dirige Larrea. “Argumentando en mi contra que había una
orden de extradición, desviando la atención de otro homicidio industrial de
ese grupo. Quisieron realizar un ‘Quinazo’, pero conmigo se chingaron esos
empleados del poder, estos funcionarios federales fueron mediocres y
corruptos. He pensado en regresar inmediatamente después de la resolución del
tribunal colegiado, pero mis compañeros han recomendado que se busque una
negociación con el gobierno actual, y solicitar que haya suficientes
garantías para mi seguridad e integridad personal. Necesitamos la formalidad
del gobierno mexicano y hemos propuesto reuniones internacionales, debido a
que los líderes internacionales han manifestado su desconfianza por el gobierno
actual y en el sistema de justicia mexicana. Sabemos que pueden hacer
cualquier cosa: sembrar armas, drogas, dinero, lo que sea y lo que buscamos
es un compromiso real, una reunión con el presidente de la República, que se
conozca por medios públicos mis derechos vigentes, válidos y que se entienda
por parte de mis enemigos que el gobierno federal está permitiendo mi regreso
porque es un acto de justicia”.
“Los contactos que he tenido han sido con Alfonso
Navarrete Prida, titular de la Secretaría de Trabajo y Previsión Social, y
Luis Enrique Miranda, subsecretario de Gobierno de la Secretaría de
Gobernación, pero argumenta con aplomo que las empresas se oponen, y
cínicamente expresan: “Tanto trabajo que nos costó sacarlo del país, para que
tú ahora lo quieres regresar”. Asegura
que estas empresas siguen teniendo infiltrados en el gobierno federal, y el
sindicato minero le contesta: “Nosotros hemos actuado con madurez y podemos
ser buenos aliados en proyectos que beneficien la productividad y el empleo”.
Realmente los empresarios difunden mentiras y engañan a los obreros y a la
ciudadanía, para que rechacen las propuestas económicas y políticas del
sindicato minero. Por lo que inferimos
que el gobierno se vería con una imagen democrática y transparente. Pero el
mensaje no se ha transmitido o tal vez la magnitud de otros problemas no ha
dejado ver claramente esta situación. Por ahora no están dadas las
condiciones para que regrese el líder minero, aunque tenga toda la voluntad
de regresar.” El líder dice que el gobierno federal no le puede quitar su
derecho a retornar, ni quitarle su nacionalidad y despojarle de su país como
tal. (La Jornada, politica, p.13, Noviembre 4, 2015).
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miércoles, 30 de diciembre de 2015
Las condiciones no son suficientes
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