Internacional/ política
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Trump pierde el apoyo del votante latino y
mexicano
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Trump promete criminalizar a latinos
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Por: Carlos Damián Sept 6, 2016
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El encuentro con el presidente mexicano es
surrealista: The New York Times
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México. - Después
de regresar del viaje exprés a México, hostigara y vigilará a los
indocumentados prometiendo regresarlos a su país, terminando la especulación
sobre si el candidato pensaba moderar su retórica enemigo del migrante para
la recta final de la contienda política. Aunque sus bases políticas que
sostienen su discurso de odio, racismo, discriminación y xenófobo expresaron
su felicidad con sus declaraciones, esto anulará toda posibilidad de obtener
mínimo apoyo entre el electorado latino y mexicano. Esto anula toda esperanza
de obtener la posibilidad de incluir el apoyo de los latinos, mujeres,
segmento lésbico-gay, y parte del segmento de afroamericanos que rechazan el
discurso de odio, y en suma de ganar las elecciones presidenciales el 8 de
noviembre. En su discurso en Phoenix, después de regresar de la visita al
inquilino de Los Pinos, el candidato republicano deja en claro que los
inmigrantes latinos son los responsables de los peores delitos en su país,
pues matan a “innumerables estadounidenses”, y son la mayor amenaza a la
seguridad pública y nacional del país de las barras y las estrellas.
Por lo que en su discurso sigue insistiendo que
va a construir un muro que pagarán los mexicanos, y que desde el primer día
insistirá en realizar deportaciones masivas –aproximadamente 6 millones,
entre ellos muchos menores de edad, hijos de inmigrantes indocumentados- y
anulará todas las medidas impulsadas por el gobierno de Barack Obama para
amparar a varios millones, incluye en sus medidas draconianas en desaparecer
el ObamaCare –entre ellos los children dreamers- y -incluye la policía de vecindad- y las
fuerzas de seguridad pública que se han dedicado a detener y deportar a los
indocumentados, y en su discurso de odio afirma que no habrá amnistía nada
que se parezca a una amnistía. En su visita relámpago a México, y como si
estuviéramos en una resaca después de una borrachera salvaje, los periodistas
intentan reconstruir lo que realmente sucedió con el presidente de México y
su ministro de hacienda, que se reveló como un activista político a favor de
Donald Trump, se incluye su vista a Phoenix. El consenso regular entre todos
ellos es que sigue siendo el mismo actor satánico y bravo, con la misma
visión xenófoba, arrastrando la cobija de todo su odio, y rencor hacia el
migrante latino que desde un principio ha enarbolado como su principal arma
en su vacía campaña política. El periódico estadounidense The New York Times, en su visita al inquilino de Los Pinos, “pintó a
México como un país de violadores, contrabandistas de droga y estafadores de
comercio”, fue tratado como “mandatario visitante en una conferencia de
prensa”, pero Trump no se sensibilizó nada, al contrario retomó con mayor
frenesí su discurso de odio y rencor a México.
En su propuesta hueca y satánica dice que va a
hacer la vida “miserable” y trató de argumentar su odio al compararlos con
los tornados “están huecos en el centro, pero hacen mucho daño”. Realmente
así es como retrató su vida y su discurso político el yanqui, con boca chica,
y carente de pelo pero enorme en su deseo de hacer daño, al sector pobre y
miserable de Estados Unidos. El
gobierno activista del republicano, lo trató como un gran estadista, pero
retornó a Estados Unidos, “en el temor y sospecha de, racismo y misoginia… y
su promesa de sacar a los 11 millones de personas que viven en Estados Unidos
sin permiso”. Con este afán de hacer
daño a los latinos, ha perdido el poco apoyo de los líderes latinos que se
atrevieron a ofrecerlo. Estos líderes dicen que al escuchar su discurso,
anuncian que renuncian al Consejo Nacional de Asesoría Hispana de la campaña
política de Trump, bueno con esta bolsa de boñiga y su discurso vacío que no
ha moderado en nada, y perciben que han sido “usados”, y están evaluando su posición
en la campaña política xenófoba.
El discurso de Trump es
”la posición más extrema de cualquier candidato presidencial en la era
moderna” (Frank Sharry); “si vives sin papeles deberías vivir en temor.
(Trump) promete, y amenaza, que la policía… sólo está esperando una luz verde
para tirar tu puerta… entregarte a las autoridades migratorias para
deportarte” (Dara Lind); “Esta fue pura política ensangrentada de
nacionalismo blanco que ha encendido a una minoría significativa del
electorado”, (John Marshal). En suma lo que logró Trump después de Phoenix y
México es perder el poco electorado que había engañado con su discurso de
odio y rencor, incluso dentro del Partido Republicano, los que han advertido
que ha perdido un porcentaje significativo de ese voto con el cual Trump no
podrá ganar la elección presidencial. Mientras en su viaje político, post
mortem, según Jorge Ramos, conductor del noticiario nacional de Univisión
–una de los líderes de opinión más significativos en el mundo latino- comentó
que como escritor en las páginas de opinión en el periódico Washington Post, y reitera que la
reunión fue entre “los dos políticos más odiados por mexicanos en ambos lados
de la frontera. Fue un encuentro de los más impopulares” hombres de estado.
Ambos dirigidos por líderes de opinión de sus respectivos partidos, se
reunieron porque ellos “pensaban ganar, pero al final sólo Trump lo logró”, ya
que no cambió sus posiciones y se fue “sin ofrecer una disculpa al pueblo
mexicano”. (La Jornada, David Brooks).
Añade que Trump fue el
que ganó en la reunión con EPN, pero “su verdadera prueba será el 8 de
noviembre en Estados Unidos. A diferencia del presidente mexicano, los
latinos aquí no permanecerán callados”, y perdidos en su propia y miserable
existencia. “No hay duda el viaje a México Trump obtuvo un éxito resonante”,
y le ofreció una oportunidad de estrenar al “Trump diplomático” y recibir el
“sello presidencial” de su anfitrión, quien quedó como el perdedor de la
apuesta, y es lógico EPN, no tiene ningún sello diplomático, y de estadista
menos. Trump uso como accesorio y mueble útil al presidente mexicano para sus
fines electorales en Estados Unidos, y el presidente mexicano con esta obra
pública logró que “de las cosas buenas nadie habla”.
Andrés M. López (AMLO) reitera
que es una cortina de humo, la visita de Trump con el inquilino de Los Pinos,
y “dirá puras mentiras”, “es una cortina de humo” para desviar la atención”
de los ciudadanos sobre el incremento de los combustibles y su
correspondiente impacto en la economía popular, pues se trata de un “impuesto
al pueblo consumidor”. Esto pasa por la corrupción que prevalece en el
gobierno de Peña Nieto, lo que anteriormente fueron las administraciones
pasadas de Vicente Fox, y Felipe Calderón (PAN), ellos como el actual no
construyeron ninguna refinería de petróleo, y comprar gasolinas, es como si
vendiera naranja y se compra jugo de naranja a Estados Unidos. AMLO consideró
“la mejor política exterior es la interior”, y antes de invitar a extranjero
que te usen como un trapo viejo, el presidente debería considerar garantizar
asuntos internos como la estabilidad de la economía. Pidió “prudencia,
respeto y firmeza” ante políticos extranjeros portadores del mensaje de odio
y rencor de un viejo imperio que se está cayendo a pedazos. “Por principio de
cuentas no debió aceptar la visita de Trump que no tiene experiencia de
política ni estadista, es un “error” histórico. Morena piensa en colocar un
muro a la intolerancia del partido republicano a lo largo de la frontera. (La
Jornada, opinión, p.p. 16-17, Septiembre 7, 2016).
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jueves, 29 de septiembre de 2016
Promete criminalizar a latinos
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