Nacional/ política
|
Es preciso extirpar este mal social llamado corrupción e impunidad en
la sociedad
|
Mea culpa presidencial
|
Por: Carlos Damián
Julio 26, 2016
|
Las autoridades están cobrando conciencia de que la irritación existe
|
México.- La intervención del
presidente Enrique Peña Nieto en el acto de promulgación de las leyes
secundarias del Sistema Nacional Anticorrupción, durante el cual pidió perdón
a los ciudadanos “por el agravio y la indignación causados por la compra de la Casa Blanca, constituye un gesto
positivo en un gobierno que en lo que va de su gestión no se ha caracterizado
precisamente por sus manifestaciones de ese tipo. La declaración contrasta de
manera notoria con las reacciones que
desde el propio entorno presidencial surgieron a finales de 2014, que fue
cuando la adquisición, el precio y las características del citado inmueble
fueron públicamente conocidas, y en las cuales se mezclaban la negación, la
minimización del hecho y también el
silencio. En México, el tema de la corrupción va estrechamente ligado al de
la ostentación, y a la riqueza, que en un país afectado por múltiples
carencias e inaceptables indicadores de pobreza resulta doblemente ofensivo. De ahí el
costo que iba a ser vivienda presidencial, su aparatosa opulencia, resultaba
difícilmente compatibles con la
austeridad que debía evidenciar el jefe de una administración que en sus
inicios había prometido atenuar desigualdades y terminar con privilegios. Por
lo demás, que el Sr, presidente asegure comprender y sentir la irritación de
los mexicanos, lo cual se evidenció en los comicios de junio pasado donde su partido, el PRI
obtuvo resultados peores de los que se esperaban.
Este resultado es un saludable cambio respecto de las consideraciones que hace tres meses formuló sobre el “malhumor social”, sino parece indicar que las autoridades están cobrando conciencia de que esa irritación existe y tiene razón. Es apropiado y significativo que las expresiones presidenciales se viertan junto a un paquete de leyes anticorrupción que debería aplicarse en la realidad. Es momento de señalar que es apenas el inicio escabroso y largo camino que será preciso recorrer para reducir drásticamente, y extirpar la auténtica plaga social de la corrupción. La corrupción y la impunidad ocupa un lugar muy alto en la lista de preocupaciones que agobian al pueblo. Esto se refleja en el índice de corrupción elaborado anualmente por Transparencia Internacional, y el país recibió una puntuación de 35 puntos en 2015. De la eficacia de los instrumentos legales que implica la creación del Sistema Nacional de Anticorrupción, se necesita la voluntad y decisión para usarlo que muestren los organismos públicos y los funcionarios encargados de su aplicación legal, y esto dependerá el éxito que se alcance en la lucha contra este pernicioso hábito. Todo esto en teoría es muy bueno pero si el ejecutivo nacional no le da medidas para darle continuidad, y que la impulsen más allá del carácter nominal y las continua observando haciendo extensiva a las estructuras gubernamentales, tanto públicas como privadas no serán una realidad plausible.
Los periodistas afectados
La periodista anunció que la hostigarían por parte de la Secretaría de
Gobernación, por medio de la “secreta” -agencia de investigación de la SG
para hostigar a los periodistas y opositores políticos- , días antes de la
pronunciación del discurso del perdón, por lo que se han intensificado la
presentación de demandas judiciales en su contra, relacionadas con la obra
“Casa Blanca”. No es un dato menor que
la escalada de agresión coincida con el anuncio de que su equipo está por
iniciar un proyecto de periodismo a través de Internet. Ante estos hechos, el
discurso del perdón es una treta preventiva del gabinete presidencial, una
taimada fórmula de auto-exculpación anticipada. En este contexto, el hecho
habría consistido en permitir jamás hubo una genuina aceptación de
ilegalidades en el proceso de adquisición y construcción en el tráfico de
influencias, sino una referencia en tono menor, justificante, pues el “error”
del ex gobernador del Estado de México habría consistido en permitir que se
produjera la “percepción” equivocada de algo que, aseguró, había estado
apegado a la ley. En cuanto a la
periodista Aristegui acumula demandas legales, en un video: (https://goo.g1/mfaV0g), se pretende que sea retirado el libro de la
Casa Blanca, que escribieron: Irving Huerta, Daniel Lizárraga, Rafael Cabrera
y Sebastián Barragán, y que se vuelva a imprimir sin el prólogo (http://goo.g1/qnTZ0v), y deje
de comentarse en conferencias, medios y otras formas de divulgación.
El proceso judicial en contra de la editorial Random House Monadadori,
y del grupo de periodistas, rechazan la censura del gabinete presidencial
donde se exige una compensación económica, por un monto escandaloso, por daño moral. En la estantería del poder es normal que a los periodistas
críticos se les envuelva en litigios costosos, amenacen su patrimonio
personal, o en su caso desaparecen los trabajos por medio del asesinato de
estos investigadores comprometidos socialmente. Este tipo de agresiones en
curso le suceden al escritor Sergio Aguayo, bajo demanda de Humberto Moreira,
ex gobernador de Coahuila, a causa de un escrito en el que habló del hedor de
impunidad y corrupción. Demanda en la que se involucra a Jesús Ortega
Martínez (PRD), la periodista Sanjuana Martínez, con una sentencia en contra,
en proceso de revisión, y al perder el recurso legal, ya se maneja un monto
de pago, y en caso de no pagar se determina el embargo. Al respecto, Rogelio
Hernández López, periodista que se ha especializado en la organización y
defensa del gremio de periodistas, escribió: amedrantar con la aplicación de
la ley para silenciar a un periodista. Si prende esa demanda –en contra de
Aguayo- será por fuerzas extralegales
y el mensaje cundirá por todas partes de México.
Si lo acallan a él, será más fácil con otros menos fuertes. El caso es
rodeado por la atmósfera nacional de agravios contra periodistas mexicanos,
para silenciar”. En esta
circunstancia, “son demasiados los indicadores: amenazas directas o
indirectas, presión a sus empleadores, agresiones verbales, y físicas, o
asesinatos. Hasta ahora, el tipo de agresión menos usada por políticos y
particulares es la presión jurídica. Pero se han creado más restricciones y
sombra que amenazan a la libertad de expresión. En estos tiempos de cambios
los códigos civiles se han modificado para que los ciudadanos se
defiendan del periodismo mal ejercido,
pero ya hay normas y reglas para restringir el libre flujo de ideas y
opiniones”. (http://goo.g1/DjkIXc).
Cajón de sastre
Por otra parte, la CNTE se queja que el gobierno federal financia
“grupos de choque” para “reprimir el movimiento magisterial. Sin embargo a
las invitaciones al doble discurso que maneja la administración federal para
reprimir y enfadar a los maestros. El magisterio disidente reiteró que el
gobierno federal va en un carril con doble sentido pero el magisterio
disidente dejó de manifiesto tres puntos para dejar en claro cómo llegar a
acuerdos. Adelfo Alejandro Gómez, dirigente
del grupo de Chiapas, aseguró que el
gobierno federal utiliza paramilitares
que “hoy están accionando, pretendiendo con ello dar a conocer que la
sociedad ya no nos da su respaldo; (eso) es falso. (La Jornada, política,
p.p. 2-8, Julio 19, 2016).
|
domingo, 24 de julio de 2016
Mea culpa
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario